Representantes de hospitales públicos y privados de distintas regiones del país advirtieron sobre una profunda crisis financiera que atraviesa el sector salud. La preocupación fue expuesta en una reunión convocada por la Defensoría del Pueblo, en la que se alertó sobre el riesgo de cierres de servicios médicos y la imposibilidad de cumplir con pagos al personal sanitario.
De acuerdo con la información oficial entregada por la entidad, las dificultades económicas que enfrentan los centros asistenciales podrían afectar de manera crítica la atención en salud, especialmente en zonas apartadas del país, donde las barreras geográficas y de transporte ya limitan el acceso a los servicios.

¿Qué dijeron los hospitales ante la Defensoría del Pueblo?
Durante el encuentro, participaron los tres principales gremios hospitalarios del país, así como más de 15 gerentes de instituciones prestadoras de salud de distintas regiones. Los asistentes presentaron análisis y cifras sobre los factores que, a su juicio, comprometen la estabilidad operativa de clínicas y hospitales.
Según señaló la Defensoría, los participantes manifestaron su preocupación por la acumulación de deudas, la falta de recursos líquidos y las consecuencias que esto ha generado en la prestación de los servicios básicos de salud. Puede leer: Defensora del Pueblo alerta crisis en Bajo Calima y Catatumbo
Principales causas de la crisis hospitalaria
Entre los elementos señalados como causantes de la crisis, los hospitales mencionaron los retrasos y déficits en los giros de recursos por parte de las EPS, situación que ha incrementado el endeudamiento institucional y generado dificultades para pagar a proveedores y al personal médico y administrativo.
También se reportaron restricciones en el uso de los recursos de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), que actualmente no pueden ser utilizados para saldar deudas de vigencias anteriores. A ello se suma un giro directo por debajo del porcentaje establecido, junto con nuevas exigencias informáticas para la facturación, lo que impacta negativamente el flujo de caja y dificulta la operatividad.

Los hospitales advirtieron que esta situación no solo compromete la sostenibilidad financiera de las instituciones, sino que también retrasa la atención médica y pone en riesgo la vida de pacientes en condición crítica, especialmente niñas y niños que residen en zonas con difíciles condiciones de acceso.
La alerta se extiende a regiones donde las distancias, la falta de transporte y las brechas en infraestructura dificultan aún más la respuesta oportuna del sistema de salud. También puede leer: Defensoría del Pueblo denuncia 21 casos de reclutamiento de menores
¿Qué hará la Defensoría del Pueblo frente a esta crisis?
En su calidad de garante de derechos fundamentales, la Defensoría del Pueblo, bajo la dirección de Iris Marín Ortiz, reiteró su disposición a mantener abiertos los canales de diálogo con todos los actores del sistema.
La entidad aseguró que continuará acompañando las discusiones en torno a soluciones estructurales que permitan garantizar el derecho a la salud en condiciones dignas, oportunas y equitativas.