Arribó a Cartagena la primera carga en plan de limpieza histórica
Arribó a Cartagena la primera barcaza con escombros provenientes de Providencia. La operación forma parte del plan de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para retirar 40 mil toneladas de residuos acumulados desde la reconstrucción posterior al huracán Iota. De esta manera, el arribo marca el inicio de una fase clave para el saneamiento ambiental del archipiélago.
El director de la UNGRD, Carlos Carrillo Arenas, explicó que esta entrega hace parte de un plan logístico con alrededor de 16 viajes marítimos hacia la capital de Bolívar. “Después de cinco años, finalmente la UNGRD comienza la extracción de los cerca de 40.000 m³ de basura que dejó la reconstrucción… Esto ha sido un enorme perjuicio para las personas que viven cerca de estos basureros, pero hoy podemos decir que es una realidad”, afirmó. Por lo tanto, la autoridad confía en que esta sea la primera de muchas acciones para cerrar definitivamente los puntos de acumulación.
Procesamiento y aprovechamiento de materiales en Cartagena
Los equipos descargarán la carga en un muelle internacional certificado y la clasificarán en una planta especializada. Allí, plásticos, metales y vidrios se enviarán a reciclaje. Como resultado, la venta de estos materiales generará recursos para proyectos comunitarios en Providencia. En cambio, los desechos no aprovechables se trasladarán a un relleno sanitario autorizado. Puede leer: 40 mil toneladas de residuos comienzan a salir de Providencia
La UNGRD destinó $40.000 millones para financiar este operativo, el cual beneficiará a más de seis mil habitantes del archipiélago. Además, el plan abarca el transporte de residuos, la recuperación de suelos y un acompañamiento social que se mantendrá durante los diez meses de ejecución. Así, la entidad busca garantizar que el impacto positivo se mantenga a largo plazo.
Impacto social y ambiental del operativo
La llegada de la primera barcaza representa un paso concreto para superar una situación que, durante casi cuatro años, afectó la calidad de vida de los residentes. Asimismo, el proceso busca reactivar el turismo y proteger el entorno natural de Providencia. En consecuencia, la UNGRD y las autoridades locales esperan que el cierre definitivo de los puntos de acumulación marque un precedente en la gestión de desechos posteriores a emergencias en Colombia.