El Dane reportó que la economía colombiana crece un 2,1% en el segundo trimestre de 2025. La cifra supera lo registrado en 2024 (1,7%) y 2023 (0,4%). Con base en estas estadísticas, el economista Dewin Pérez Fuentes, PhD y magíster en Ciencias Económicas, afirmó que “la economía colombiana comienza a transitar por un buen sendero de crecimiento sostenido”.
Pérez explicó que el desempeño económico actual “ya empieza a reflejarse en el mercado laboral y en lo que seguirá ocurriendo con los niveles de pobreza y desigualdad”. Según dijo, este repunte marca un cambio frente a los últimos años, en los que el país estuvo sometido a una fuerte desaceleración.
Economía colombiana crece más que potencias internacionales
En su lectura de las cifras globales, Pérez destacó que “Colombia está creciendo por encima de Estados Unidos y de la Unión Europea, e incluso por encima de otros países reconocidos a nivel mundial”. Consideró que esta situación representa “una señal alentadora de resiliencia y competitividad en un contexto donde varias economías desarrolladas muestran estancamiento”.
Economía colombiana crece impulsada por comercio, agricultura e industria
El análisis reveló que “el comercio y la agricultura fueron responsables del 71% del crecimiento nacional en este trimestre”. El economista subrayó que lo más relevante es que “la industria manufacturera inicia su despegue con crecimiento positivo, después de un largo periodo recesivo”.
“La industria es fundamental porque genera empleos de mejor calidad. Es el sector de mayor productividad y el que más encadenamientos crea con otras actividades. Su recuperación permite que el crecimiento se vuelva más generalizado y que impulse el empleo en otros sectores”, explicó.
No obstante, el economista advirtió que “la construcción mostró un crecimiento negativo”. Lo calificó como un campanazo de alerta y señaló que este retroceso está ligado al impacto de las altas tasas de interés. Puede leer: La pobreza monetaria en Cartagena cae pero persiste la brecha.
Banco de la República frente al reto de las tasas de interés
Pérez también dirigió una advertencia al Banco de la República: “Gran parte de la desaceleración que sufrió la economía colombiana en los últimos dos años se explica por el estrangulamiento de la inversión productiva causado por las altas tasas de interés”.
Reconoció que la decisión del Emisor respondió a la necesidad de contener la inflación. Sin embargo, aclaró que “el panorama cambió y la inflación ha cedido más rápido de lo previsto”. Recordó que “el Banco tenía como meta regresar al rango de inflación objetivo en 2026, pero en 2025 ya estamos prácticamente dentro de ese rango”. También puede leer: Economía popular en Cartagena: proponen integración digital
Por ello, planteó que “el Banco de la República debe leer la realidad nacional, como lo han hecho otros bancos centrales en el mundo. Debe avanzar en una reducción de tasas que oxigene la actividad productiva”.
El economista insistió en que no se trata de comprometer la independencia del Banco. Lo que se necesita, dijo, es “una política macroeconómica coordinada, que no se limite a la estabilidad, sino que esté enfocada en el desarrollo económico y social”.
Inversión productiva supera al consumo
El análisis también mostró un hecho positivo: “La inversión productiva creció entre 6,2% y 6,3%, casi el doble de lo que creció el consumo”. Pérez explicó que este comportamiento es clave porque “la inversión productiva impulsa la capacidad de la economía, permite producir más bienes intermedios y de consumo, y genera bases sólidas para un crecimiento más vigoroso”.
En cuanto al consumo, precisó que “los bienes durables fueron los que más dinamizaron la economía en este trimestre”. Eso, dijo, también representa un estímulo para varios sectores industriales.
Retos en construcción, empleo y desarrollo social
Para Pérez, el principal desafío es mantener y aumentar las tasas de crecimiento. “Necesitamos crecer más para impactar de manera directa el mercado de trabajo con empleos productivos de calidad. Solo así podremos seguir reduciendo la pobreza y la desigualdad”.
Advirtió que “la industria ha comenzado su recuperación, pero requiere un mayor impulso para consolidarse”. También insistió en que “el sector de la construcción, altamente intensivo en empleo, necesita una respuesta más decidida del Banco Central y del Gobierno nacional, especialmente para garantizar la expansión de la vivienda de interés social y de edificaciones privadas”.
Pérez puntualizó que “la construcción de vías férreas y carreteras avanza a buen ritmo en el marco de los programas del Gobierno. Sin embargo, es necesario que el crecimiento se extienda al segmento de vivienda social para tener un mayor impacto en el empleo y el bienestar”. Puede leer: Gobierno anuncia millonaria inversión para el Chocó
Vivienda social como motor de empleo
El economista recalcó que “el crecimiento económico no puede quedarse concentrado en los sectores de mayor capital. Debe llegar a los sectores más vulnerables de la población”. Agregó que esto no se logra “a punta de subsidios, sino a través de empleo productivo y mayor inversión”.
“Vamos por buen camino, pero necesitamos aumentar los esfuerzos. La responsabilidad no es solo del Gobierno nacional. Requerimos un Banco de la República que actúe de acuerdo con las necesidades de la economía y un Estado que coordine la política macroeconómica con visión de desarrollo”, concluyó Pérez.